domingo, 4 de septiembre de 2011

EL DINOSAURIO Y LA TELARAÑA INFINITA



“Un dinosaurio, se balanceaba, sobre la tela de una araña. Como sabía, que resistía, fue a llamar a otro dinosaurio… Dos dinosaurios, se balanceaban, sobre la tela de una araña. Como sabían, que resistía, fueron a llamar a otro dinosaurio… Tres dinosaurios, se balanceaban, sobre la tela de una araña…”  (Parafraseando el coro popular: "Un elefante, se balanceaba...")

¿Recuerdan ustedes, mi anterior nota sobre “El dinosaurio que entendió Internet?  El mismo “dino”, ahora se he propuesto “navegar” en esa enorme red.

“Lo mejor que puede haberse creado en los tiempos actuales: el Viagra y el Internet” (Pablo Cuvi, escritor ecuatoriano que usualmente publica sus crónicas en la revista Mundo Diners, y sus artículos de opinión en el Diario EL COMERCIO, lo dijo en una charla sobre Periodismo Interpretativo realizada en la Udla. O6-08-2011)

Es un hecho, Internet existe, y en los tiempos actuales  ha cambiado muchas cosas. Antes existía poca información disponible, y los que la necesitaban, debían investigar en libros, revistas, documentos, etc. Hoy, –gracias a Internet- existe una abundante cantidad de información, disponible inmediatamente.

Antes el mercado de noticias, era escaso. Ahora, -con el Internet- es abundantísimo. Usted puede leer la misma noticia en diferentes diarios, gratis. Ya la prensa escrita no tiene el monopolio de la información. La radio, primero. La televisión después, fueron amenazas. Se leía la prensa inicialmente, luego se entrevistaban personas –sobre la noticia- luego se opinaba, fueron etapas de evolución. El Internet ha cambiado radicalmente la manera de estar informado. Se puede contextualizar la noticia mucho mas. Se pueden incluir muchas mas imágenes, añadir infografías, incluir audios,  hacer enlaces desde una palabra (hiperlinks). El Internet, posee una gran cantidad de opciones…

¿Dónde se guarda tanta información? La respuesta es: en la red. En la WWW (World Wide Web).  El Internet, es una red mundial de computadores que comparten información. Forman una enorme telaraña mundial. Se llega a la información a través del Internet –moviéndose, navegando en esa red- eso significa que unas arañas (navegadores, o motores de búsqueda) se mueven a velocidades impresionantes por esa enorme telaraña, buscando lo que usted requiere.

Las arañas, buscan y encuentran la información usando la clave “http” (hiper text transfer protocol). Entones  la telaraña está siempre en desarrollo. En constante construcción, ya que muchísimos usuarios están poniendo datos, fotos, música, imáges, desde muchísimos lugares.  Están añadiendo muchísima información, que puede se compartida a todos los que deseen usarla.

Una de las cosas que a veces desanima a nuestro amigo dinosaurio es la cantidad de “acrónimos”, que debe aprender, para moverse y tratar de entender esta telaraña. Un ejemplo de esas raras cosas,  entre muchas, son las siguientes:

-       ¿Qué es la Web? ¿Qué es un servidor Web? ¿Qué es una dirección Web?
-       ¿Cómo mandar un mensaje por Internet? ¿Cómo un documento?
-       ¿Qué hacer cuando un amigo le dice: respóndeme a mi mail?
-       ¿Cómo entender los íconos?
-       ¿Qué es Windows? ¿Qué es un blog?
-       ¿Cómo hacer copy-paste?
-       ¿Qué es Wikipedia? ¿Qué es Google?
-       ¿Qué es y cómo quemar un disco?
-       ¿Qué es una memoria flash, y de (xx) Gigas?
-       ¿Qué es un byte? ¿Qué es ASCII (aski)?
-       Etc. Etc.

En este camino -lleno de tecnologías-, investigando se dio cuenta, que la telaraña era muy resistente. La telaraña había empezado llamándose tecnología WEB 1.0: Eran páginas inmóviles para el usuario que las veía. Se podía leerlas, pero no escribir, opinar, cambiar, poner “me gusta”. Su unidad de contenidos eran páginas. Su condición era estática. Eran visibles a través de navegadores web. Y quienes podían dominarlas eran los “Geeks” ( los super expertos).

Después de la tecnología 1.0, los expertos crearon una nueva telaraña: la red de tecnología WEB 2.0:  Esta red cambia los paradigmas establecidos en la anterior. Son páginas dinámicas, los usuarios pueden interactuar con la página (información publicada). Pueden escribir, aportar, opinar, incluir imágenes, sonido. Los contenidos son puestos por los usuarios. La unidad de contenido son los “posts” (notas gravadas participativamente). Son accesibles desde navegadores, desde lectores RSS (Realy Simple Syndication, o sea de acceso simple).  Pretendiendo una alfabetización digital masiva, para que el usuario agregue twits, blogs, videos, música, etc. 

La red 2.0, comparada con la 1.0, está centrada en el usuario, no en la tecnología. En la utilidad y funcionalidad para el lector. En la posibilidad del intercambio colectivo, no solo en los datos de “aquí se puede encontrar, solamente”. En la rapidez y agilidad con la que los usuarios interactúan, no en la reacción del propietario de la página. En fin... -En la mejora continua-. Ya que todos pueden ser agregadores de contenidos (inteligencia colectiva: opinan sugieren, comentan, cambian). En la red 2.0, se puede chatear (conversar entre usuarios), se pueden formar grupos (comunidades afines de usuarios), se puede hablar.

Y por último, los expertos están desarrollando una telaraña mas fuerte, (aunque existe mucha oposición), la red de tecnología WEB 3.0:  Esta red es personalizada, agrupando a los usuarios por gustos, aficiones, profesiones, deportes, pasatiempos, etc. (lo cual atenta contra la privacidad).

Esto tiene bastante preocupado a nuestro buen amigo, no sabe cómo empezar a aprender y a veces se pregunta: ¿Es necesario saber tanto?  Si lo que yo quisiera –dice-, es solamente: poder usar Internet…

Definitivamente nuestro dinosaurio, está encaramado en la telaraña, o suma de telarañas, (que como en las frases iniciales dice: “…como sabía, que resistía…”) quisiera moverse mas rápido, entendiendo como hacerlo. Por el momento está atrapado en la “infinita telaraña mundial”.

Nuestro “dino”, está resuelto a moverse. Quiere aprender y sabe que arañas navegadoras le van ayudar a encontrar mucha información,  ya que muchos autores están diciendo algo de lo que el quiere saber, y sobre muchísimos temas más.

Estimados amigos: tengan paciencia, en pocos días, nuestro amigo dino, que está avanzando en un curso de periodismo, va a contarles cómo empezar a  escribir y poner información en Internet (“ayudas mínimas de navegación”). Es decir empezar a moverse, no solo buscando información, sino escribiendo y sumándose a esta telaraña mundial. Saludos a todos. 

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